Marco Pedagógico Didáctico

La propuesta pedagógica propone un servicio educativo de calidad con atención diferenciada desarrollando conocimientos, capacidades, habilidades y destrezas en las diferentes áreas en un ambiente de armonía y afecto, cimentado en valores.

Desde la perspectiva constructivista es que nuestra escuela entiende que aprender implica participar de forma activa y reflexiva. Es por esto que se postula la necesidad de entregar al alumno herramientas (generar andamiajes) que le permitan crear sus propios procedimientos para resolver una situación problemática, lo cual implica que sus ideas se modifiquen y siga aprendiendo.

El proceso de enseñanza se percibe y se lleva a cabo como un proceso dinámico, participativo e interactivo del sujeto, de modo que el conocimiento sea una auténtica construcción operada por la persona que aprende, nuestros alumnos. Los contenidos impartidos resultan de una programación sistemática a partir de la selección y graduación de los mismos, con una metodología específica y coherente en todos los grados y áreas.

A partir de los conocimientos previos, el docente guía para que los estudiantes logren construir conocimientos nuevos y significativos, favoreciendo y promoviendo en el alumno las posibilidades de crecimiento en el más amplio sentido humano, movilizando sus potencialidades individuales desde el Lenguaje, las Ciencias, el Arte, la Comunicación y el Deporte.

En este proceso de aprendizaje constructivo, el profesor cede su protagonismo al estudiante quien asume el papel fundamental en su propio proceso de formación. Es el propio estudiante quien habrá de lograr la transferencia de lo teórico hacia ámbitos prácticos, situados en contextos reales.

Se propone un estudiante:

  • Activo: de manera que sean ellos mismos quienes interactúan y exploran; además de darles la oportunidad de concientizar el resultado de su manipulación del aprendizaje.
  • Constructivo y reflexivo: forje nuevos conocimientos y los acomode a los previos, lo cual lleva a la reflexión de su propio aprendizaje.
  • Intencional: que proponga o evalúe metas a alcanzar y además monitoree hasta qué punto logra las mismas.
  • Auténtico, retador y contextualizado: que sitúe su aprendizaje en situaciones reales, lo cual lo prepara para futuros retos.
  • Cooperativo, colaborativo y conversacional: que interaccione entre estudiantes para discutir problemas, aclarar dudas y compartir ideas.

El estudiante tiene un rol imprescindible para su propia formación, un protagonismo que es imposible ceder y que le habrá de proporcionar una infinidad de herramientas significativas que habrán de ponerse a prueba en el devenir de su propio y personal futuro.

Contamos con un equipo docente en permanente actualización y capacitación que posiciona al alumno en el abordaje de recursos disponibles para poder resolver las diversas situaciones de aprendizaje que se le presentan en su trayecto escolar.